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Marzo 2014 – Noticias y Novedades
Libro: Ojos del Salado


Andes Catamarqueños


Restauración Fotográfica:
Centro Cultural Argentino de Montaña, Natalia Fernández Juárez


AUTOR:
Eduardo Nuciforo

EDITORIAL:
Industrias Graficas Aeronáuticas, Buenos Aires, Argentina.

AÑO:
31 de Marzo de 1959

FORMATO:
16 x 22 cm.

PÁGINAS:
106

IDIOMA:
Castellano

Tapa del Libro Ojos del Salado, Andes Catamarqueños
Autor: Eduardo Nuciforo


Prologo

Eduardo Nuciforo ha concretado en realidad una obra tan hermosa como difícil: la publicación de un libro como el presente, en el que se relatan las múltiples peripecias vividas durante la expedición que el Grupo de Montaña "Halcón" realizara en 1958 al cordón "Ojos del Salado". Después de leer las páginas de su manuscrito, y puesto en la honrosa tarea de prologarlo, debo confesar la profunda emoción con que lo hago, no sólo por el emocionante recuerdo de inolvidables horas transcurridas en las alturas, sino también y sobre todo por saber que un compañero de la montaña entrega a la juventud el precioso tesoro de experiencias recogidas durante su reciente aventura.

Nuciforo es un andinista cuya vocación por la montaña lleva consigo desde edad muy juvenil, como lo demuestran sus múltiples viajes por sierras y montañas, con sus piernas por único transporte, y en incesante tentativa de dominar la naturaleza, en toda la virginal pureza de la altura.

Miembros de la expedición a Ojos del Salado. Eduardo Nuciforo, Reverendo Luis Arch, Norman Romanenghi, Alberto Angeleri, Guillermo Alanis. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Integrantes de la expedición. Libro Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Miembros de la expedición a Ojos del Salado. Luis Sable, Daniel Powel, Santos Carrizo, Manuel Alvarez, Pedro Carrizo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Integrantes de la expedición. Libro Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Lo más notable es que nunca haya encarado una profesión que estuviera relacionada con el estudio mismo de la tierra. Mas su inclinación a conquistar cerros y su espíritu de viajero le llevaron a aproximarse cada vez más con lo natural en aquellos parajes donde el acceso del hombre se ve privado de los medios moderno» y a donde se llega con la voluntad y el esfuerzo de cada individuo.

En la temporada de 1956-57, el Grupo de Montaña "Halcón" realizó su primera expedición a los Andes Catamarqueños, y en dicha oportunidad fueron también dirigidos por el autor de este libro. Si bien en ella no se logró la codiciada cumbre, no puede llamarse fracasada pues fue la semilla eficiente que fructificó después con la experiencia recogida.

Fue así que en 1957 los pormenores de una segunda expedición fueron cuidadosamente planeados, siempre bajo la dirección de Nuciforo, en el decisivo intento de hacer flamear en lo alto la enseña nacional. La diligencia, el sacrificio y el aporte generoso de quienes nos ayudaron para emprender la marcha definitiva, abonaron el camino del Grupo, que logró con ingentes esfuerzos el triunfo apetecido.

Nuciforo condujo hábilmente esa expedición, y tuvo así el honor de capitanear al grupo argentino que lograra asentar su planta juvenil sobre la cúspide del coloso andino, que aún lanza por su boca silenciosa, vaporosos rezongos de eclosiones geológicas envejecidas.

El lector encontrará en su libro un relato vivido y apasionante de cuanto aconteció en la aventura, y aún el técnico hallará elementos útiles para él mejor conocimiento del ambiente geográfico catamarqueño. La nitidez de la fotografía nos aproxima a la inconmensurable belleza de un paisaje extraordinario.

Llegada a El Arenal (5.800 mts). Expedición Ojos del Salado. Foto: Eduardo Nuciforo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Llegada a El Arenal (5.800 mts). Expedición Ojos del Salado.
Foto: Eduardo Nuciforo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Vista de las cuevas naturales utilizadas como refugios en Aguas Calientes (4.150 mts).
Foto: Eduardo Nuciforo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Quien haya conocido la montaña, él gozo espiritual de la altura, y la desbordante pureza del panorama andino, ha de apreciar sin duda lo que esta obra significa como aporte para divulgar la riqueza natural argentina en sectores que aún no la conocen en su integridad.

Que la juventud de la. Patria, a quien ha dedicado su obra sepa recibir el mensaje del autor, y valorar él ejemplo de los bravos muchachos que cumplieron la hazaña como un nuevo y renovado ejemplo del temple argentino.

Juan José Murra
Geólogo
Jefe Grupo Montaña Halcón

Introducción

Al comenzar a escribir sobre los pormenores de la organización y tareas que cumplió la Expedición Argentina "Halcón", que venció el Cerro "Ojo del Salado", encumbramiento principal del cordón homónimo, es de nuestro interés hacer resaltar que el autor de esta obra, como casi todos los montañistas, no es escritor de profesión ; no obstante ello, tratará de narrar los hechos de la manera menos técnica posible, para que, no sólo puedan leerla los que practican montañismo, sino también aquellos que no lo conocen o que poco saben de este deporte. También para el que tenga un concepto demasiado elemental o errado sobre la materia, llegue a él y viva las alternativas de esta empresa, que después de muchos sacrificios logró vencer la cumbre, consiguiendo sus integrantes hacer flamear el pabellón nacional en la cima de este coloso de América.

Campamento I, El Arenal. Expedición a Ojos del Salado. Foto: Eduardo Nuciforo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Campamento I, El Arenal. Expedición a Ojos del Salado. Foto: Eduardo Nuciforo.
Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Ello se logró merced a la disciplina del grupo, a su capacidad, tenacidad y una serie de privaciones a costa de la integridad física, sufriendo serias afecciones y el drama de un compañero extraviado.

Despertar el espíritu de aventura, la curiosidad por aquellos lugares inhóspitos de los Andes Catamarqueños, algunos de los cuales, son aún desconocidos... haciendo que el hombre de la ciudad, se interese por esta clase de relatos y algunos de los pormenores de este viril deporte, tal el mayor galardón a que aspira el autor, y también su íntima esperanza.

Las montañas siempre impresionaron de diversos modos al hombre y fueron una perenne incitación a su espíritu aventurero y deportivo. Pero no se animaba a treparlas, ya que creía que las altas cumbres eran moradas de dioses y de espíritus: atracción y temor, tales eran los sentimientos primordiales que despertaban los montes de la tierra en los hombres primitivos. Después superaron estas ideas y, ya fuera para rendir culto a esos dioses o para desafiar a los espíritus, el hombre asciende a las cumbres y va naciendo en él, el placer de esta tarea; aprende a admirar desde sus cimas todo el mundo maravilloso que lo rodea, comienza a amar a la montaña y ésta se humaniza.

Hacia la cumbre de Ojos del Salado. Foto: Eduardo Nuciforo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Hacia la cumbre de Ojos del Salado. Foto: Eduardo Nuciforo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Dos miembros de la expedición atravesando un glaciar existente en la vertiente SO.
Foto: Eduardo Nuciforo. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Así nace este nuevo deporte, que comenzó a adquirir desarrollo hace aproximadamente medio siglo. Naturalmente, primero se desarrolló en Europa (Los Alpes, Pirineos, etc.). En el año 1921, George Leigh-Mallory conduce la primera expedición inglesa al monte Everest, logrando llegar hasta los 7000 mts. de altura, toda una hazaña en esta época y recién el 29 de mayo de 1953, después de muchas tentativas, la expedición al mando del coronel Hunt y patrocinada por la Real Sociedad Geográfica y el Club Alpino de Londres, logra vencer la cumbre más alta del mundo; fueron sus conquistadores: Edmund P. Hillary, apicultor neozelandés y Tensing Norkay, guía nepalés.

En América, se podría decir, que en el aspecto deportivo recién comenzamos, pues nuestros triunfos de importancia se lograron hace aproximadamente tres décadas, pero ello no quita que existan grandes valores humanos, y las montañas más altas de Occidente. El campo que se presenta para esta nueva actividad es amplísimo; disponemos de todo tipo de montaña en nuestra dilatada cordillera, que se extiende en toda la extensión del territorio. Prueba de ello, son las grandes y renombradas expediciones internacionales de allende el mar, que nos han visitado.

La República Argentina, con su extensa y dilatada cordillera, ofrece pues a nuestra actividad un verdadero paraíso de montañas, y los argentinos debemos lograr sus cumbres, para que llegue el día que, en cada cerro por difícil que sea, flamee el pabellón nacional, como vigía de nuestra soberanía.

A LA JUVENTUD ARGENTINA,
HOMBRES DEL MAÑANA
Y ESPERANZA DE
NUESTRA
PATRIA

Cumbre del cerro Ojos del Salado (Cota A, 7.800 mts). Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Cumbre del cerro Ojos del Salado (Cota A, 7.800 mts). Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños


Indice

PROLOGO
INTRODUCCIÓN

Capitulo I
Características del Cerro Ojo del Salado.......................................................

Capitulo II
Nace una expedición..................................................................................

Capitulo III
Fiambalá...................................................................................................

Capitulo IV
Cazadero Grande.......................................................................................

Capitulo V
Aguas Calientes........................................................................................

Capitulo VI
Campamento Nº 1....................................................................................

Capitulo VII
Campamento Nº 2....................................................................................

Capitulo VIII
En la cumbre............................................................................................

Capitulo IX
Angustia..................................................................................................

Capitulo X
Final de la expedición...............................................................................

Capitulo XI
La odisea de Angeleri...............................................................................

Palabras Finales......................................................................................
Epílogo....................................................................................................

XV
XVII


1


7


11


15


21


27


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Vencedores de la cumbre del cerro Ojos del Salado. De izq. a der.: Daniel Powel, Eduardo Nuciforo y Luis Sablé, en Cazadero Grande. Foto: Padre Arch. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños

Vencedores de la cumbre del cerro Ojos del Salado. De izq. a der.: Daniel Powel, Eduardo Nuciforo y Luis Sablé, en Cazadero Grande. Foto: Padre Arch. Libro de Montaña: Ojos del Salado, Andes Catamarqueños


Área Restauración Fotográfica del CCAM: Natalia Fernández Juárez


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